Caen antiguos imperios mientras surgen otros nuevos. La decadencia de unos acaba siendo el auge de otros. Es curioso ver como hay bandas que cada vez se hacen más y más grandes mientras que otras no dan pie con bola.
Katatonia empezaron sin pena ni gloria en la escena de doom metal de los 90 y han ido creciendo, evolucionando su sonido sin perder un ápice de calidad, hasta nuestras fechas. Cada vez más cercanos al metal progresivo, pero sin olvidar la etapa anterior, creando un estilo único que arrastra una legión de fans que no para de crecer.